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El Museo Oceanográfico de Mónaco reconocido como “el templo del mar” fue creado por el Príncipe Alberto I y se encuentra al lado de la mítica Roca de Mónaco. Se trata de un museo que posee más de seis mil especies marinas y en el cual desde su decoración hasta toda su espléndida arquitectura evocan a la maravilla del mundo marino.
El príncipe Alberto I, creador de este maravilloso museo, era un marino y precursor de la oceanografía desde su temprana juventud. Tenía un fuerte vínculo con el mar, vínculo que lo llevó a emprender una serie impresionante de 28 exploraciones científicas. El fin era profundizar sus estudios sobre los océanos para luego poder promover y compartir con la humanidad sus descubrimientos.
Para dar a conocer la oceanografía, ciencia que empezaba a nacer a principios del siglo XX, decidió dedicarle una fundación, el Instituto Oceanográfico. Creado en 1906, esta fundación reconocida de utilidad pública se apoya en dos espacios: el Museo Oceanográfico de Mónaco y la Casa de los Océanos de París.
A bordo de navíos cada vez más perfectos (el «Hirondelle», el «Princesa Alicia», el «Princesa Alicia II» y el «Hirondelle II»), este príncipe visionario recorrió el Mediterráneo, llegó hasta las Azores y se aventuró a viajar al Ártico en el «Spitzberg».
Sus travesías en el Océano Atlántico y el mar Mediterráneo han sido consideradas como pioneras. Por lo general, estas se caracterizaban por ser realizadas en barcos oceanográficos avanzados para su época. Viajaba acompañado siempre por un equipo de científicos: biólogos, zoólogos, botánicos, geógrafos, entre otros especialistas.
Bajo la dirección del príncipe se crearon los primeros mapas de las profundidades oceánicas del mundo, que tuvieron vigencia hasta 1944. Solía escribir sobre los resultados de sus expediciones, los cuales fueron publicados bajo el título The Navigator’s Path. El 10 de septiembre de 1889 se convirtió en el monarca del Principado, debiendo enfocarse a partir de entonces en las responsabilidades inherentes a su cargo.
El Príncipe Alberto I creó el Museo Oceanográfico de Mónaco con el fin de propiciar el estudio de las colecciones y descubrimientos adquiridos en las diversas expediciones que llevó a cabo. Bajo el lema de su fundador, “conocer, amar y respetar a los océanos”, el museo dispone de 6,500 m² abiertos al público, que en la actualidad sobrepasa los 700,000 visitantes anuales.
El Museo Oceanográfico abre sus puertas al arte contemporáneo y acoge grandes exposiciones. A imagen de las realizadas con los artistas Damien Hirst, Huang Yong Ping, Mark Dion, Marc Quinn o, más recientemente, Philippe Pasqua.
En la parte del Museo Oceanográfico podemos encontrar la Sala de la Ballena y la Sala de Alberto I. En estos se puede descubrir la oceanografía a través de:
A su vez, encontramos también los acuarios, en los cuales por un lado tenemos “las profundidades marinas del Trópico”.Podemos encontrar la zona tropical:
Y por otro lado, “en el fondo mediterráneo” en el que se encuentran:
Enamorado de los viajes y fotógrafo aficionado. Mi pasión es viajar, pero siempre acompañado de mi cámara. Como unión de estas dos cosas nació Viajeros por el Mundo!
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