El Mirador de Santa Lucía es uno de esos típicos rincones que posee Lisboa. Es un pequeño lugar encantador que ofrece espectaculares vistas sobre Alfama, el río Tajo y los alrededores. Ubicado sobre cubierta de buganvillas y rodeado de paredes con azulejos desconchados.
Desde este lugar se puede obtener una hermosa vista y una visión panorámica desde otro ángulo de la ciudad. Los techos con tejas rojas de las antiguas casas del centro de Alfama. El río azul que se une con el Océano Atlántico, así como la cantidad de cruceros que arriban a tan pintoresco puerto que suelen llegar cargados de turistas.
Existen edificaciones de importancia histórica que puedes identificar desde esta perspectiva. Tal es el caso de la Iglesia blanca de San Esteban o la cúpula del Panteón Nacional. Y por supuesto, la Iglesia de San Miguel o la antigua Iglesia de San Engracia.
Mientras caminas por el Mirador de Santa Lucía, es muy frecuente que te encuentres con pintores aficionados. Ellos se encargarán de retratar cada momento, el amanecer o el atardecer, siempre dispuestos a venderte su arte.
La Iglesia de Santa Lucía es un lugar que vale la pena visitar mientras caminas por el lugar. Su construcción fue ordenada por la Orden de Malta, es uno de los edificios más sencillos pero prestigiosos de la ciudad. En su interior existen múltiples tumbas que lo hacen atractivo.
En su fachada hay una gran pared de azulejos que representa a la Plaza del Comercio antes del terremoto de 1755. En otro grupo de mosaicos demuestra la reconquista del Castillo de San Jorge por parte de los cristianos. Está declarado como Monumento Nacional.
Es ideal para permanecer un día soleado y caluroso, donde vas a disfrutar de hermosas vistas mientras la brisa te refresca. Esto pasa mientras las buganvillas proporcionan protección contra la luz solar intensa. Además de contar con músicos y artistas callejeros que animan el Mirador de Santa Lucía como parte de vender su trabajo. Es realmente un placer de vida estar aquí.
Esta hermosa vista con las sensaciones que el lugar es capaz de proporcionarte, puedes acompañarlo de un rico café. Acercarte a una de las lindas cafeterías que decoran el lugar con sus diseños que armonizan la zona. Allí podrás tomar una bebida caliente o fría y acompañarla de un refrigerio. Todo esto hace un complemento perfecto de emociones de satisfacción.
El Mirador de Santa Lucía es un hermoso complejo ideal para compartir con la familia. Contemplar el lugar, descansar y relajarse juntos con el fresco y frondoso jardín de fondo es lo mejor que puedes hacer. Y si esperas a la apuesta de sol, seguramente no te decepcionará.
Debes utilizar el tranvía número 28, y solo bajas en la parada que se encuentra justo enfrente. No tiene pérdida alguna llegar hasta este sitio.
Enamorado de los viajes y fotógrafo aficionado. Mi pasión es viajar, pero siempre acompañado de mi cámara. Como unión de estas dos cosas nació Viajeros por el Mundo!
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