?>
La Puerta de Brandenburgo es uno de los símbolos más reconocibles de la capital alemana. Se trata de una antigua puerta de acceso al Berlín amurallado y hoy, es una de las grandes atracciones de la ciudad y su entorno, uno de los más atractivos.
Su construcción se basó en los portales de la Acrópolis de Atenas de Grecia, incorporando arenisca con la cuadriga durante su construcción y el tiro de cuatro caballos de bronce con la diosa de la Victoria. Actualmente, esta puerta es el sitio elegido para la realización de diversas manifestaciones, fiestas y eventos especiales.
Construida entre los años 1788 y 1791. La Puerta de Brandenburgo tiene 26 mts. de altura, 11 mts. de largo y 65,5 mts. de ancho y se utilizó para construirla, piedra arenisca.
La puerta cuenta con 5 accesos, siendo el central el más ancho. Sostenida por columnas de estilo dórico, en su parte interior y superior exhibe relieves con las figuras de Marte, Hércules y Minerva. Aunque la puerta tiene cinco entradas, desde su construcción hasta el año 1918, el paso central de la puerta sólo podía ser utilizado por miembros de la familia real y algunos pocos afortunados.
En la parte superior de la puerta se encuentra una enorme escultura de cobre de 5 metros de altura que representa a la diosa de la Victoria montada sobre un carro tirado por 4 caballos y que se ubica en dirección a la ciudad.
Tras su construcción, la Puerta de Brandeburgo gozó del esplendor que le correspondía viendo pasar bajo sus arcos a los miembros de la realeza, las tropas de Napoleón y presenciando algunos desfiles nazis.
La tranquilidad de la Puerta de Brandeburgo terminó tras la llegada de la Segunda Guerra Mundial, que causó graves daños a la estructura y prácticamente destruyó la cuadriga.
En 1956, ambas partes de la ciudad dividida aunaron sus fuerzas para la reconstrucción de la puerta. Fue en 1961, tras la construcción del Muro de Berlín, cuando la puerta quedó perdida en tierra de nadie, atrapada entre el este y el oeste, sin que prácticamente nadie tuviera acceso a ella.
Tras la reunificación de la ciudad, la Puerta de Brandeburgo, después de tantos disgustos, por fin recuperó el lugar que se merece.
Tanto de día como de noche, la Puerta de Brandeburgo es uno de los puntos más importantes y agradables de ver en Berlín. Los turistas se agolpan continuamente frente a su majestuoso semblante para tomar la fotografía más representativa de su viaje a Berlín.
Enamorado de los viajes y fotógrafo aficionado. Mi pasión es viajar, pero siempre acompañado de mi cámara. Como unión de estas dos cosas nació Viajeros por el Mundo!
Pulsa en para ampliar el mapa
Viajeros por el Mundo funciona gracias a WordPress