Antigua catedral de Carcasona, hoy, la Basílica de Saint-Nazaire es la única iglesia que vamos a encontrar dentro de la ciudadela.
Iniciada en tiempos del románico, allá en el siglo XI, fue ampliada y transformada siglos más tarde hacia un estilo gótico, predominante en la Francia de entonces.
En su interior, un conjunto de vitrales de belleza excepcional, incluidos los dos rosetones del transepto, así como un pórtico y unos capiteles de estilo románico llaman la atención del visitante y cautivan sus sentidos.
Casi todo es el resultado de las restauraciones llevadas a cabo por el arquitecto medieval Viollet-le-Duc, tantas veces cuestionado por su fantasía excesiva y su lejanía de las líneas tradicionales y originales, pero que, finalmente, dieron un resultado excelente.
Enamorado de los viajes y fotógrafo aficionado. Mi pasión es viajar, pero siempre acompañado de mi cámara. Como unión de estas dos cosas nació Viajeros por el Mundo!
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