Jalan Alor es la calle más famosa entre los malayos y turistas que visitan Kuala Lumpur. Se encuentra en el centro de la capital y esconde su propia esencia entre los puestos de comidas, música, colores y peatones.
Años atrás esta calle era considerada zona roja en la capital de Malasia. Pero, luego se fue transformando hasta convertirse en el paseo de las comidas. Cada anochecer se convierte en un espectáculo por sí misma con la llegada de los vendedores y artistas callejeros que se suman en su oferta a los bares y restaurantes.
Además de la gran cantidad de personas que circulan por las noches en Jalan Alor, la variedad de platos es única. Es posible encontrar comidas típicas de Malasia de todo tipo y a precios realmente muy económicos. Lo mismo que podríamos pedir en restaurantes más top de la ciudad, pero con la magia de la cultura callejera.
Una de las dudas que surgen a los extranjeros que no dominan el idioma chino es saber cómo diferenciar las comidas. Es verdad que la mayoría está descrita en su idioma original, sin embargo también algunos locales disponen de menús en inglés. De igual modo, que este detalle no los desanime porque siempre hay gente dispuesta a dar sugerencias.
Te aconsejo que recorras Jalan Alor Street todas las veces que puedas y pruebes diversos platos. La mística está en hacer las filas, observar cómo se entremezclan las culturas existentes en Malasia y divertirse. Siéntate en alguna de las mesas y disfruta de los artistas que realizan sus espectáculos a la gorra.
En la zona hay una gran cantidad de hoteles y casas de alojamiento. Un lugar muy práctico para hospedarse en Kuala Lumpur por las atracciones que tiene y la comodidad para acceder a medios de transportes públicos.
Jalan Alor Street es de libre circulación y un símbolo de la capital de Malasia. Si bien puedes visitarla de día, lo más vistoso se encuentra por la noche. Al caer el sol comienzan a llegar los vendedores y armar sus puestos. El ambiente se colma de aromas, murmullos, luces y el show comienza.
Enamorado de los viajes y fotógrafo aficionado. Mi pasión es viajar, pero siempre acompañado de mi cámara. Como unión de estas dos cosas nació Viajeros por el Mundo!
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