El Ferry de Staten Island es el único transporte acuático que une Manhattan con Staten Island. La alternativa ideal para ver Nueva York desde el agua, además una vista gratuita de la Estatua de la Libertad.
Antes de la construcción de puentes, los condados de Nueva York eran accesibles solo mediante un complejo sistema de transbordadores. Se trataban de embarcaciones administradas por el sector privado que brindaban un servicio de transporte necesario para muchos.
En el año 1901, luego de un terrible accidente, la gestión de los mismos pasó a ser responsabilidad del ayuntamiento de la ciudad de Nueva York. En la actualidad, alrededor de 9 buques conforman la flota que transporta a millones de personas durante el año de un lado al otro. Se convirtió durante el último siglo en un ícono de los lugareños, pero en especial de turistas.
Comienza el viaje del enorme buque naranja y el paisaje que tienes frente a tus ojos es digno de un cuadro. El dibujo que forman los rascacielos del Distrito Financiero de Mahattan, el World Trade Center y la urbe que se aleja son maravillosos.
Si observas haca la costa del río Hudson, se aparece la histórica Nueva Jersey tal como la has visto en las series de televisión. De acuerdo al lugar que hayas elegido en el Ferry de Staten Island, deberás moverte para tomar una fotografía. Hay capacidad en el interior y en el exterior de los camarotes.
A mitad de camino resurgirá la soñada Estatua de la Libertad y la isla Ellis. Es la mejor opción para fotografiar al emblema estadounidense sin pagar. Solo debes estar atento con tu cámara, acercar y alejar la lente, para tener imágenes desde todas las perspectivas.
Para comenzar debes recordar que es un servicio gratis que ofrece el ayuntamiento de Nueva York. Pues, siempre hay algún tramposo que ofrece tikets en las calles para turistas que desconocen el funcionamiento.
El paseo de ida es emocionante y el consejo es permitirse la admiración de todo lo que se ve, posar, tomar fotografías, respirar la libertad. Asimismo, puedes beber una copa en su concesión de alimentos a bordo. Un brindis con los amigos es siempre bienvenido.
Al llegar a Staten Island es obligación descender y solo se regresa con otro ferry para el cual hay que hacer la cola correspondiente. Pero, antes de eso, es mejor recorrer el distrito y conocer otra parte de nuestro destino.
La isla tiene muy bellos lugares para conocer y continuar con la aventura. Es de gran ayuda comprar una MetroCard antes de viajar, de esta forma tomarán una autobús local y vives un día distinto.
Enamorado de los viajes y fotógrafo aficionado. Mi pasión es viajar, pero siempre acompañado de mi cámara. Como unión de estas dos cosas nació Viajeros por el Mundo!
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