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Ubicado en lo alto de una loma y custodiando el camino que unía la Costa con Castilla, está el Castillo de Argüeso o Castillo de San Francisco de Argüeso. Fácilmente visible desde la carretera de acceso Paracuelles. Fue declarado Bien de Interés Cultural en 1983 y en la actualidad funciona como centro cultural que recibe miles de visitantes cada año.
En el siglo XI hubo una ermita bajo la advocación de San Vicente, así como una necrópolis altomedieval en el lugar que ocupa actualmente el castillo. Sus restos aún pueden verse en lo que es el patio de armas del castillo.
Entre los siglos XII y XIV se alzaron las dos torres del castillo. Y para el siglo XV se añadió un cuerpo que unió las torres y una muralla. Ya en el siglo XV con la aprobación de los reyes católicos fue creado el Marquesado de Argüeso.
Luego se dotó al conjunto de un potente cinturón amurallado a modo de barbacana que aprovechó la fisionomía del cerro y cerraba el actual patio de armas. El acceso es posible a través de un arco sostenido por ménsulas y protegido por un matacán de madera.
El Castillo de Argüeso, de estilo gótico, guarda relación con las luchas entre señores de finales del medievo. Los Mendoza sostuvieron pugnas constantes contra los Manrique por el dominio del campo.
En principio fue habitado por la familia de la Vega de influyente linaje noble en tierras cántabras. Más tarde debido al casamiento de Leonor de la Vega con Diego de Mendoza acabó siendo propiedad de los Mendoza. Fruto de su unión nació Íñigo López de Mendoza primer Marqués de Santillana.
Tras décadas de continuo deterioro y posterior abandono fue cedido en el año 1962 al municipio de la Hermandad de Campo de Suso. Para el año 1988 y con la ayuda del gobierno de Cantabria fue sometido a un fuerte y minucioso proceso de restauración que duró 15 años y el resultado ha sido majestuoso.
Las torres de perfil prismático fueron realizadas a base de mampostería y sillarejo, con refuerzos de sillares más sólidos en ángulos y vanos. Estas torres no fueron concebidas respetando cierta simetría, quizás por las condiciones físicas del terreno sobre el cual se asienta.
A lo largo de los muros de estas torres se abren pequeños vanos y aspilleras, únicamente accesibles a través de escalas portátiles, reforzando así su naturaleza defensiva.
Merece especial reconocimiento y admiración el trabajo artesanal realizado sobre madera noble durante la reconstrucción. A cargo de Tomás Sobaler y su equipo de artesanos. Representa junto al de San Vicente de la Barquera el único caso de fortaleza roquera y defensiva del territorio cántabro.
Su razón de ser se debe a su estratégica posición desde la que se dominaba el paso natural de Cantabria hacia la Meseta y las rutas de trashumancia hacia los valles del Ebro y Saja. Convirtiéndose quizás en el primer asentamiento fortificado del lugar.
El Castillo se ha convertido en uno de los principales focos culturales del sur Cantabria. Es sede de jornadas de recreación histórica, exposiciones temporales, bodas civiles y conciertos. Puedes concertar con previa cita una visita más completa que incluya talleres medievales.
Siguiendo la CA-183, carretera que une la Reinosa con la estación de esquí de Alto Campo encontrarás la vía de acceso a Argüeso. El castillo es fácilmente visible desde allí.
Enamorado de los viajes y fotógrafo aficionado. Mi pasión es viajar, pero siempre acompañado de mi cámara. Como unión de estas dos cosas nació Viajeros por el Mundo!
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