Las Ruinas Romanas de Bruñel, también conocidas como La Villa Romana de Bruñel, se encuentra ubicada a unos 7 kilómetros de Quesada. La encuentras en la carretera que va desde Quesada hasta Cazorla en la hacienda Plaza de Armas.
El término “Villa” se usó en la antigüedad para definir dos tipos de edificaciones que se ubicaban fuera de las ciudades, es decir La Villa es:
La Villa de Bruñel, se construyó con el fin de ser una villa residencial para los romanos que pasaban por esta zona en sus cruzadas. Sin embargo, también se hizo para hacer posesión de las tierras que la rodean y su explotación. La edificación se levantó en el siglo II. Esta se hizo en tres fases.
En la primera fase de la construcción se levantó un pórtico con 4 columnas en su frente con un impluvium (estanque rectangular para recoger agua de lluvia) central y mosaico de escrituras flemáticas en contorno.
A 40 centímetros de altura sobre el nivel del estanque, se localizaban dos habitaciones una del lado este y otra del lado oeste; y otra habitación del lado sur situada a 80 centímetros sobre el piso anterior.
Esta fase se realiza en el siglo III, y en ella se construyó el cubrimiento con suelo de mosaico. Se perfecciona con una escalera, esta nueva área se establece como el ala norte de un patio. Es un patio con varias columnas que llegó a tener pestañas decorativas cuadrangulares en forma de escalones, entre los cuales corría el agua.
Desde el pasillo oriental se llegaba a dos habitaciones con paredes decoradas con estuco y mosaico de medallones, entramado de octógonos y estrellas de rombos. El sistema de agua se alimentaba de la fuente de tégulas ubicada en el sector Noroeste de la construcción.
La tercera fase se realizó en el siglo IV. Fue pensada para realizar trabajos agropecuarios y también como una villa urbana. Los maestros de obra continuaron utilizando parte de la villa anterior. Sin embargo, derribaron la mitad de la villa para construir una gran sala de 50 metros con cúpulas contrapuestas.
Algunas personas han insinuado que son los restos de una iglesia paleocristiana. Pero debido a la ausencia total de restos de sepulcros o culto, y la presencia de instrumentos de cultivo, señala todo lo contrario.
La Villa de Bruñel quedó reducida a cenizas debido a un incendio ocurrido en el siglo V. Este lugar fue excavado por primera vez en el año 1924. Los hallazgos más importantes que se consiguieron fueron los restos de enseres, un sarcófago infantil de plomo y una estela con inscripción apenas legible.
Estos hallazgos se hicieron diez años después de iniciar la excavación, pero sin duda alguna, los mosaicos son lo más espectacular de este lugar. Muestran formas humanas y animales, también muestran decoraciones vegetales y geométricas. Lo que más sobresalta es el mosaico dedicado a la diosa Thetis.
En el mes de noviembre de 2017, la Junta de Andalucía declaró que pondría en valor las ruinas romanas de Bruñel, con un área de admisión de visitantes, un estacionamiento y la apertura al público.
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